Ciudad de México, 16 de noviembre de 2023. Integrantes de la colectiva Se dice de mí y de la Asamblea Feminista Rafaela afirmaron que las particularidades de los entornos “determinan la forma de hacer feminismo”, ya que hay múltiples maneras de transitarlo y construirlo en los distintos momentos de cada generación, según los contextos. Lo anterior, en el marco del conversatorio “Feminismos y territorialidades en contextos no metropolitanos. Experiencias militantes en Argentina”, organizado por la Universidad Nacional de Rafaela, la Universidad El Bosque, la colectiva Murciélaga y la Red Universitaria de Géneros, Equidad y Diversidad Sexual de la Unión de Universidades de América Latina y el Caribe (UDUALC).
El espacio de discusión fue moderado por Leila Martina Passerino y Denise Zenklusen, docentes e investigadoras de la Universidad Nacional de Rafaela, Argentina, y forma parte del ciclo de protesta y feminismo en Argentina; tuvo como objetivo recuperar las experiencias de militancia en las ciudades intermedias de la provincia de Santa Fe, especialmente las ciudades de Rafaela y Esperanza.
En su intervención, Agustina Méndez narró que en 2017 surgió Se dice de mí, ante la necesidad de organizarse como mujeres, ponerle nombre a las cosas, así como introducir una perspectiva feminista y un vocabulario en el que se utilice el concepto feminicida en lugar de asesino, además de aspectos como la transversalidad para explicar que los hechos de violencia no sólo “se deben cargar sobre el victimario sino que tienen un maco más amplio que involucra a un sistema de control, de dominación y a visibilizar que el Estado debe responder por la violencia hacia las mujeres y empezar a ampliar la mirada hacia otros colectivos como las diversidades y las niñeces que sufren este tipo de violencia”.
Méndez señaló también que en las ciudades chicas y conservadoras hay muchos desafíos, uno de ellos es que no se cuenta con el beneficio del anonimato a diferencia de las ciudades grandes, “una vez que eres identificada como un elemento disruptivo en la sociedad eres objeto de violencia por parte de personas que te conocen de toda la vida”. Subrayó el hecho de que la proximidad es difícil pero no imposible “siempre estamos repensándonos para no terminar siendo parte del paisaje, para no ser parte de la hegemonía, pero a la vez esta docencia nos permitió abrir canales de diálogo con el poder, con el consejo, con la gestión y con el consejo de salud pública”.
Por su parte, las integrantes de la Asamblea Feminista Rafaela rememoraron cómo fue el nacimiento del grupo Enredadera que, aunque ahora ya no existe, fue la primera agrupación en hablar de aborto y en defender los derechos de las mujeres y que fue borrada de la militancia de la ciudad. Abordaron también la problemática que atraviesan las agrupaciones al requerir el apoyo de los partidos políticos y la administración del Estado y que, en la mayoría de las ocasiones, no respondieron de la manera que se requería.
GDR
